Caos en el concierto de Springsteen en Santiago. El concierto que 'El Boss' ha ofrecido en Santiago ha causado polémica.
El concierto que Bruce Springsteen ofreció en Santiago ha causado polémica. El caos que se vivió en el recinto han hecho que decenas de personas hayan presentado denuncias ante la Policía Nacional, el Ayuntamiento de Santiago y la Oficina Municipal de Atención al Consumidor al atribuir a la organización las aglomeraciones e incomodidades creadas en el concierto de Bruce Springsteen, que cerraba su gira europea. Después de que 'El Boss' pasase por España en el concierto de Springsteen en Bilbao, en Sevilla y Valladolid entre otros.
Las quejas fueron provocadas por las dificultades a la hora de acceder al recinto del concierto, fallos que se le atribuyen exclusivamente a la organización del evento, la empresa Doctor Music.
Los aficionados que presentaron denuncias alegaron, entre otros fallos, que tuvieron que esperar unas dos horas para poder acceder al recinto, lo que la organización niega, al asegurar que se abrieron las puertas a las 20 horas, dos horas antes del inicio previsto para el concierto.
También denunciaron que cuando empezó el concierto todavía quedaban personas esperando fuera del recinto, momento en que los responsables de controlar las colas permitieron que accediese la gente sin comprobar las entradas, de modo que, al final, también entraron personas que no habían pagado la entrada.
La hora de apertura de puertas estaba prevista para las 20 horas debido a que Bruce Springsteen y su equipo habían tocado en Valladolid el día anterior y era «absolutamente imposible» hacer el traslado y montar todo antes, según la organización. A partir de ese momento, se produjeron aglomeraciones, sobre todo en la Rúa das Estrelas, y «hubo un número importante de personas con entrada que no accedieron al recinto».
El portavoz de Doctor Music, Daniel Gutiérrez, ha apuntado que el Monte do Gozo exige «habilitar accesos públicos» y, como «sólo había dos y muy separados, se produjo una aglomeración en uno, mientras el otro estaba bastante más vacío». Esa «saturación de gente produjo nerviosismo», ha añadido y ha admitido que «posiblemente, algunas personas llegaron con algo de demora al concierto».